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AYÚDANOS A PROTEGER A LOS NIÑOS Y NIÑAS REFUGIADOS
DONARLos derechos de los menores migrantes y refugiados no están garantizados
Los derechos de los menores migrantes y refugiados no están garantizados y son violados allí donde hay crisis migratorias. La dura realidad habla por si sola: 1 de cada 78 personas en el mundo está desplazada.
El número total de desplazados y refugiados que han huido de la violencia en el mundo sigue aumentando y ya está cerca de los 100 millones. Todos ellos están expuestos a altos niveles de estrés antes de su partida, durante su viaje y continúan estándolo al llegar a su destino, lo que, unido a la separación familiar, eleva la probabilidad de que su salud mental se vea afectada. AYÚDANOS A PROTEGERLES.
En Aldeas Infantiles SOS ayudamos a refugiados y migrantes en 13 países a través de nuestros 31 Programas de Respuesta de Emergencia activos en la actualidad. Con ellos hemos atendido a 192.400 personas con el objetivo de cuidar de los niños y las niñas, proteger sus derechos y mantener a las familias unidas.
La mitad de los refugiados del mundo son niños. Están expuestos a altos niveles de estrés y se enfrentan a un riesgo extremo de separación de sus familias, pérdida de seres queridos y violencia.
Durante la última década, el número de personas que se ven forzadas a abandonar sus hogares a causa de la violencia, la inestabilidad política y los desastres naturales no ha dejado de crecer. En 2018, se alcanzó la cifra récord de 70,8 millones, de los que 25,9 son refugiados, es decir, han abandonado su país de origen, y el resto son desplazados internos. Estos últimos buscan zonas más seguras dentro de su propio país.
Los niños separados de sus padres son más vulnerables a sufrir explotación, abusos y violencia. Todos ellos están expuestos a altos niveles de estrés antes de su partida, durante su viaje y al llegar a su destino. Una situación que, unida a la separación familiar, eleva las probabilidades de que desarrollen problemas de salud mental.
Casi todos los niños refugiados o migrantes que pasan por Aldeas Infantiles SOS han experimentado estrés tóxico, también conocido como distrés. Un trastorno de salud mental derivado de haber sufrido las consecuencias de la guerra, la discriminación, el desastre y algún tipo de abandono.
Tenemos casos de niños cuyos padres han muerto o desaparecido. Niños que fueron capturados y sufrieron experiencias muy duras. Niños que han vivido en la calle, aterrorizados e inseguros, hasta encontrar un hogar gracias a nuestros programas.
En situaciones como estas los niños necesitan mantener la relación con sus familias. Un niño que no está conectado con una familia puede experimentar una crisis de identidad. Crisis que generalmente va acompañada de estrés tóxico, postraumático y de otros problemas de salud mental.
“Es muy desconcertante para un niño no saber si su padre o madre están vivos o muertos.”
Los derechos y la protección de la infancia
Es necesario garantizar los derechos de todos los niños del mundo. En especial los de aquellos que están en peligro, quienes tienen derecho a una protección especial. La legislación internacional se la otorga pero en la práctica, no la reciben (campos de refugiados, calle, detenciones, devoluciones en caliente, violencia…).
Desde Aldeas Infantiles SOS reclamamos a los países de tránsito y recepción que cumplan con la legislación. Los gobiernos no pueden dar la espalda a los niños y niñas que huyen de sus hogares en busca de seguridad. Las autoridades competentes deben compartir la responsabilidad y tener en cuenta las siguientes necesidades:
La etiqueta 'refugiado' o 'migrante' no puede limitar los derechos que tienen todos los niños
En Aldeas Infantiles SOS ponemos nuestros recursos y experiencia a disposición de los países de recepción de refugiados y migrantes. Ofrecemos a los gobiernos nuestros programas de acogimiento para menores no acompañados y de apoyo a familias vulnerables.
¿Cuál es nuestra labor?
En Aldeas Infantiles SOS nos centramos en la acogida de menores no acompañados y defendemos los derechos y la protección de todos los niños y niñas. Proporcionamos apoyo a las familias desplazadas y cuidado a los niños solos o separados de sus padres. Una labor que llevamos a cabo mediante Programas de Respuesta de Emergencia que incluyen:
Cobertura de necesidades básicas
Facilitamos alimentos, saneamiento, refugio y servicios de salud a miles de familias y niños que necesitan ayuda urgente.
Educación
Ofrecemos actividades educativas, recreativas y deportivas a niños que tienen entre 4 y 14 años.
Atención psicológica y emocional
En Aldeas Infantiles SOS consideramos fundamental la atención psicológica a niños y familias refugiadas o migrantes. Por eso contamos con psicólogos especializados en recuperación de traumas como el estrés tóxico o distrés.
Reunificación familiar
Trabajamos para que los niños que viven en los programas de acogida de Aldeas Infantiles SOS puedan regresar con sus familias biológicas.
Apoyo y atención a largo plazo
Ofrecemos asesoramiento, cursos de idiomas, educación y formación profesional a largo plazo. Ayudamos a los niños refugiados a prepararse para la vida independiente y la integración en la sociedad
Además, en algunos de los países donde los niños refugiados y migrantes encuentran nuevos hogares, también trabajamos para garantizar que haya soluciones a largo plazo que les permitan integrarse en la sociedad. Desde Aldeas Infantiles SOS hemos logrado dar estabilidad a muchos niños refugiados y migrantes y, con tu ayuda, continuaremos haciéndolo.