Se inicia una nueva etapa en la implementación del proyecto europeo Infancia Segura: prevención y respuesta a la violencia entre iguales.

Tras meses de investigación, consulta a profesionales, niños, niñas, adolescentes y jóvenes y de preparación de materiales, se ha puesto en marcha un plan de formación con el objetivo de entender, identificar, prevenir y dar respuesta de una manera adecuada a las situaciones de violencia entre iguales.

Este programa se ha iniciado con la formación de formadores y formadoras de los cinco países que participan en el proyecto (Bélgica, Francia, Italia, Rumanía y España) que tuvo lugar en Granada y Madrid durante los meses de mayo y junio. Estos formadores y formadoras son ahora, a nivel nacional, los encargados de impartir cursos a profesionales y de preparar a jóvenes de entre 18 y 20 años para que realicen talleres dirigidos a sus iguales. En el equipo de formadores y formadoras de Aldeas infantiles SOS España para el proyecto (formado por tres personas) se incluye una joven con experiencia en cuidado alternativo.

La primera fase del desarrollo de estas formaciones en España comenzó recientemente en Granada. Se está trabajando con un grupo de 11 jóvenes de todo el país que participan o han participado en diferentes programas de Aldeas y que, a su vez, serán los encargados de impartir talleres a niños, niñas y adolescentes de entre 11 y 15 años en los que trabajará la creación de entornos más seguros para ellos, ellas y sus iguales. Para ello, se les está formando en aspectos como estereotipos y discriminación, espacio personal, límites y consentimiento, construcción de relaciones positivas, herramientas para protegerse o cómo comunicar y pedir ayuda a los adultos, entre otros temas.

Este grupo de jóvenes se siente orgulloso de que se haya contado con ellos y ellas para impartir esos talleres ya que, además de explorar el programa de formación, están descubriendo capacidades personales y es un regalo verles ganar confianza en tan solo unos días. Estos chicos y chicas también han contado con tiempo para hacer grupo y divertirse. Según señalan, los materiales y actividades realizados “dan en la diana”, “son como un mapa para encontrar un tesoro” y “son como abrir una puerta a distintas formas de ver las cosas”.

Por su parte, desde la coordinación del proyecto afirman estar “muy ilusionados con esta nueva fase ya que será clave para capacitar y empoderar a jóvenes, niños y niñas para aplicar conductas protectoras en sus vidas y ser agentes activos en la creación de entornos seguros”.