Aldeas Infantiles SOS recibe en Granada a 44 adolescentes ucranianos

España

El cuidado de su salud emocional será prioritario, así como posibilitar el contacto directo y diario con sus familiares en Ucrania

Aldeas Infantiles SOS recibe a 44 adolescentes y siete monitoras de la Federación Ucraniana de Deportes de Invierno que hasta ahora permanecían en el Albergue Juvenil de Sierra Nevada. La organización ha habilitado cinco de los hogares de su Aldea de Granada para ofrecerles un entorno seguro y protector y un cuidado integral a largo plazo. También ha puesto a su disposición a todo un equipo multidisciplinar de educadores sociales, pedagogos, trabajadores sociales y psicólogos. Esto ayudará a favorecer la integración de los chicos y las chicas y velar por su bienestar.

Niños y niñas ucranianas en España

El primer paso será evaluar la situación emocional de todos ellos. El objetivo es poner a su disposición un servicio psicológico personalizado que les ayude a lidiar con su situación y con la incertidumbre de tener a sus padres y a sus familias en Ucrania.

“Todos estos chicos y chicas tienen acceso a la información sobre la guerra, leen las noticias, se enteran de lo que pasa en su país a través de las redes sociales. Sin embargo, al hablar a diario con sus familias creemos que pueden sentir que les ocultan algo para que no se preocupen y tienen miedo. Miedo de que sus padres corran peligro y les pase algo”, Javier Vigil, director territorial de Aldeas Infantiles SOS en Andalucía.”

El cuidado de la salud mental de estos menores y de sus entrenadoras es prioritario para Aldeas. Al igual que posibilitar el contacto directo y diario con sus familiares en Ucrania para ayudarles a rebajar la ansiedad y la incertidumbre que puedan padecer. Para facilitar esta labor, Aldeas Infantiles SOS ha contratado a una traductora e intérprete ucraniana que favorecerá la comunicación, el diálogo y la intermediación.

Dos adolescentes de Ucrania con su entrenadora

Los responsables legales de estos chicos y chicas son sus siete monitoras, según autorizó la embajada ucraniana en España con el consentimiento de las propias familias. Además, recuerda que algunas de las entrenadoras apenas superan los 20 años. Por eso, Aldeas también va a ofrecerles sesiones informativas y orientativas sobre la figura del tutor legal en España y las implicaciones y responsabilidades que conlleva. “Son niñas cuidando de otros niños, de ahí la importancia de intensificar nuestros apoyos y de brindarles todo el asesoramiento y la orientación que necesiten, desde ir al médico, al supermercado o a hacer cualquier trámite”, resalta Javier Vigil.

Una atención a largo plazo

Desde que el pasado 19 de marzo estos chicos y chicas fueran alojados en el Albergue Juvenil de Sierra Nevada, han contado con el apoyo inicial de la Junta de Andalucía, la Federación Andaluza de Deportes de Invierno (FADI), Cetursa Sierra Nevada y de medio centenar de familias de los clubs de esquí de Sierra Nevada.

A partir de ahora, Aldeas Infantiles SOS asumirá íntegramente los gastos derivados del alojamiento y la manutención de estos menores y procederá a su escolarización, tramitación de documentación e inscripción en el servicio andaluz de salud pública. Además, hemos destinado10.000 euros para el acondicionamiento de los cinco hogares que albergan a los chicos y chicas, y estima en 8.000 euros el gasto medio por mes para todos ellos, sin contar la inversión en recursos humanos. Un desembolso que Aldeas podrá afrontar gracias al apoyo de sus socios y donantes.

Por su parte, la FADI seguirá apoyando a estos chicos a nivel deportivo y los integrará en sus programas de entrenamiento. “Desde Aldeas entendemos el deporte como una herramienta muy potente de integración, superación y reparación. Por eso, contribuiremos y facilitaremos que estos chicas y chicas mantengan su arraigo con el esquí y continúen su carrera deportiva”, explica el director territorial de Aldeas en Andalucía, Javier Vigil.

Estos chicos, que tienen entre 12 y 17 años, pertenecen a la Federación Ucraniana de Deportes de Invierno. En el momento de estallar la guerra se encontraban en un centro de alto rendimiento deportivo ubicado en los montes Cárpatos, cerca de la frontera de Ucrania con Eslovaquia y Hungría. Los jóvenes esquiadores realizan la disciplina de esquí de fondo.

A través de una iniciativa privada, el grupo realizó un trayecto de cuatro días en dos autobuses hasta llegar a la estación de esquí de Sierra Nevada, en Granada. Poco después del inicio de este viaje, las entrenadoras recibieron la noticia de que su centro de entrenamiento había sido bombardeado y destruido en el marco del conflicto bélico.

“Los 44 chicos y chicas se están adaptando muy rápido a la Aldea, y su relación con los educadores y con los profesionales está siendo muy positiva. Juegan en las zonas comunes, hacen deporte, juegan al fútbol, charlan entre ellos, con nosotros… Y esto es fundamental para que vayan acostumbrándose a sus nuevas rutinas y para que se sientan felices y como en casa el tiempo que se queden con nosotros, que es lo que pretendemos desde Aldeas”, explica Javier Vigil.

Un par de días después de la llegada de los 44 adolescentes, se unieron al grupo la madre y la abuela de uno de los chicos. La organización puso a su disposición un hogar independiente dentro de la Aldea para que puedan disfrutar de la intimidad que necesitan y del espacio adecuado para adaptarse a su nueva realidad.