Una respuesta de emergencia para Venezuela
Más de tres millones de venezolanos han abandonado el país desde 2015 debido a la situación social y económica. Se estima que un millón de ellos viven en Colombia y 85.000 han buscado refugio en Brasil. La agencia de la ONU para los refugiados lo llama “el mayor éxodo en la historia reciente de América Latina”.
Aldeas Infantiles SOS ha puesto en marcha programas de respuesta de emergencia en Brasil y Colombia para ayudar a los migrantes venezolanos.
Colombia
Aldeas Infantiles SOS de Colombia ayuda a los niños y familias de Venezuela que han buscado refugio en el país. De los tres millones de venezolanos que han abandonado Venezuela desde 2015, un millón ha buscado refugio en Colombia.
La organización en el país puso en marcha el programa de emergencia “Toma mi mano” en junio de 2018. Desde entonces han apoyado a más de 600 niños y 450 adultos en la Guajira y el centro-norte de Santander. Además, 1.900 venezolanos en la región de Santander han recibido kits de alimentos e higiene.
El objetivo de esta respuesta de emergencia es proteger a los niños y jóvenes de la violencia de género, explotación sexual y abusos. Los espacios para niños están situados en Villa del Sur, Riohacha, Maicao y Uribia (en La Guajira) brindan un ambiente seguro y protector donde pueden jugar y disfrutar de actividades educativas.
Actividades de la respuesta de emergencia en Venezuela:
- Detectar a niños no acompañados en La Guajira y albergue temporal para familias vulnerables de Venezuela en Santander.
- Evaluar las necesidades de cada familia: salud, educación, apoyo legal y de salud mental.
- Proteger a niños no acompañados a través de los programas de protección de Aldeas.
- Ofrecer albergues temporales y apoyo nutricional para niños y familias vulnerables.
- Transportar a familias vulnerables o personas con necesidades especiales debido a las largas distancias.
Brasil
El programa de respuesta de emergencia “Brasil sin Fronteras” comenzó en julio del pasado año. Las primeras familias fueron recibidas en los programas en Río de Janeiro y Pernambuco. A finales de ese mismo año ya se atendían a familias también desde São Paulo, Caicó, Goioerê, João Pessoa, Porto Alegre y Brasilia. Gracias al trabajo de nuestros equipos, 760 refugiados se alojaban en 42 casas. De ellos, casi 350 eran niños.
Además, Aldeas de Brasil ha ayudado a más de 150 personas a encontrar empleo en los primeros seis meses. Esto permitió que 87 familias comenzaran una nueva vida en el país.
Nuestros equipos trabajan con cada familia para identificar sus necesidades y crear un plan individual. Las familias también reciben apoyo para acceder a educación, asistencia social y de salud, y otros servicios públicos.
Actividades de la respuesta de emergencia en Venezuela:
- Asegurar que se respeten los derechos legales de los niños y adolescentes que viven en refugios para refugiados.
- Suministrar alimentos, agua y artículos de higiene a las familias de refugiados.
- Ofrecer habilidades y formación profesional, así como actividades socioculturales y talleres sobre los derechos de las familias venezolanas.
Ilvania Martins es la Directora Nacional de Aldeas Infantiles SOS de Venezuela:
“Nos sentimos aliviados de decir que los niños que están bajo nuestro cuidado y los trabajadores de nuestros programas no se han visto afectados por los disturbios de los últimos días en Venezuela”, asegura Ilvania Martins, Directora Nacional de Aldeas Infantiles SOS de Venezuela
Los programas en Maracaibo, Ciudad de Ojeda, Turmero y Caracas funcionan normalmente y las familias SOS tienen acceso a suficientes alimentos y medicamentos. La Oficina Nacional sigue funcionando normalmente también.
Sin embargo, esto no significa que los desafíos cotidianos se resuelvan. Nuestros programas permanecen en alerta máxima y hemos desarrollado planes alternativos para garantizar la seguridad y protección de los niños bajo nuestro cuidado en caso de que cambien las condiciones. Nos adaptamos continuamente a la situación cambiante en Venezuela para minimizar las interrupciones en la vida cotidiana de los niños y para mantener sus necesidades nutricionales y médicas. Los niños asisten a la escuela regularmente y las actividades de la comunidad siempre que sea posible”.
Nuestros equipos continúan prestando ayuda en las fronteras y facilitando el viaje de los migrantes hacia una nueva vida. La prioridad para Aldeas Infantiles SOS, como en todas las situaciones de emergencias, es proteger a los niños, reunirles con sus familias en el caso de que vayan solos y devolverles la estabilidad que necesitan.